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A mitad de febrero, se celebran las fiestas mayores de invierno: las fiestas de Santa Eulalia, co-patrona de Barcelona, también conocidas por Laia.
El legendario barcelonés explica que en la época del emperador romano Diocleciano, en el siglo IV, se ordenó que fueran perseguidos todos los cristianos que había en el imperio. En Barcelona, muchos se escondieron y unos cuantos huyeron. En vista de aquella situación, Eulalia, una niña de trece años que vivía en una masía de Sarrià, demostró una gran valentía presentándose al cónsul Daciano para rebelarse contra aquellos actos tan injustos. Eulàlia fue encarcelada y castigada, pero no se dejó vencer y luchó tanto por sus ideales que acabaron costándole la vida.
Desde entonces, aquella niña pasó a ser un símbolo de solidaridad y de defensa de la justicia y todavía hoy es venerada por los barceloneses, patrona de Barcelona hasta el siglo XVII.
Actualmente, las fiestas rinden homenaje a Santa Eulalia (el 12 de febrero), con una programación llena de actividades relacionadas con la cultura popular y para todos los públicos. Se destacan la procesión de las Laies, el séquito de Santa Eulalia, el Ball de l’Àliga, dentro de la basílica de Santa Maria del Mar, castellers y el correfoc, con la participación del bestiario histórico de la ciudad y los diables.
Además, la sardana está muy presente durante las fiestas de Santa Eulalia. Se organiza un baile de sardanas a cargo de la Cobla Ciutat de Barcelona, que acaba con la interpretación del baile de Santa Eulalia, coincidiendo con la llegada de la procesión de las Laias. Esta procesión es uno de los actos más antiguos de la celebración actual, que consiste en un pasacalle encabezado por las gigantas de Ciutat Vella, que aquel día son rebautizadas con el nombre de Laia.
Como es también tradición, una veintena de centros culturales, edificios y museos de la ciudad se suman a las fiestas, con jornadas de puertas abiertas y actividades diversas. Destacamos, el CosmoCaixa, el castillo de Montjuïc, las fundaciones de Joan Miró y Antoni Tàpies, el MUHBA, el MACBA o el Museo Marítimo, entre muchos otros.
Paralelamente a las fiestas mayores de invierno, también tiene lugar el Llum BCN, un festival que ilumina Barcelona, en el que la tradición se funde con nuevas formas de expresión que transforman la ciudad con el lenguaje de la luz. En el Llum BCN encontraremos un conjunto de actividades que exploran las posibilidades creativas de la iluminación y las proyecciones, con talleres, instalaciones y espectáculos, como el video mapping.
La propuesta estrella son los espectáculos de mapeo sobre las fachadas de algunos edificios y monumentos de la ciudad, que también se iluminarán para la ocasión. Es la oportunidad perfecta para hacer una ruta nocturna y descubrir un nuevo aspecto de la Torre Agbar, el Palau de la Virreina o el Arc de Triomf, entre muchos otros.